AI vs Humans
El tema que ahora es inescapable en el mundo del arte es el uso de inteligencia artificial como parte de una línea de trabajo del artista, pero de ahí nace la duda: ¿realmente podemos llamar a esas imágenes arte?
Primero, todos deberíamos tener por lo menos una vaga idea de lo que estas inteligencias artificiales que generan imágenes al escribir palabras son: programas de machine learning que utiliza una base de datos para poder arrojar un resultado al usuario que lo esté utilizando. Este programa no piensa por sí mismo, depende totalmente de las imágenes con las que el usuario lo alimente. Y aquí está el mayor problema que los artistas encuentran con el uso indebido de estos programas: el robo de sus obras para el entrenamiento de estos.
Muchos comparan lo que las inteligencias artificiales hacen con lo que pasa dentro del cerebro de los artistas: el análisis que hacemos para poder plasmar una imagen junto con el banco de referencias que forman nuestra carrera y la técnica que cada uno de nosotros tiene y ha practicado. Estos programas como Stable Diffusion y Midjourney usan, sin permiso, miles de obras para poder entrenar sus modelos para que, cuando un usuario quiera el estilo de “x” artista, la imagen asimile lo más posible al mismo.
Entonces, ¿por qué usar uno de estos programas para obtener una imagen en 10 segundos en vez de aprender, estudiar y practicar por años? Ahí mismo está la respuesta. El mundo no te va a esperar hasta que seas el mejor artista que puedes ser y va a demandar una cantidad absurda de arte en un tiempo claustrofóbico con un salario mínimo, dejándote de lado si no te adaptas a la “nueva realidad”. ¿En serio es esto lo que el mundo quiere y necesita?
Si vamos con definiciones hechas por artistas, filósofos o historiadores, nos encontramos con unas cuantas:
“El arte es el recto ordenamiento de la razón” -Tomás de Aquino
“El arte es expresión de la sociedad” -John Ruskin
“Arte es vida, vida es arte” -Wolf Vostell
¿Realmente necesitamos que alguien más nos diga la definición de arte? Cada quien puede tener su respuesta, el arte es subjetivo y discutible, esa es una de las razones por las que los humanos disfrutamos de hacerlo, verlo o criticarlo.
Estos programas repercuten directamente en los trabajos de personas que disfrutan trabajar en un ambiente creativo y son recompensados por hacerlo bien. Hemos visto ejemplo de esto con directivos de empresas proponiendo el escaneo de actores de fondo para su uso en cualquier proyecto por solamente un día de pago sin derecho a regalías. Por esto mismo, al momento de redacción, los actores y escritores de Hollywood hacen huelga para la mejora de contratos incluyendo cláusulas para el uso moralmente correcto de programas como ChatGPT u otros.
Contrario a como puede parecer, no estoy en contra del uso responsable de “inteligencias artificiales”, la palabra clave aquí es responsable. ¿Quieres hacer una imagen chistosa o ridícula que vas a usar para tu grupo de amigos? Adelante, probablemente sea un muy buen meme. ¿Quieres hacerte pasar por un artista de alto nivel con Midjourney? Detente, ese trabajo no es tuyo. El punto es no robar el trabajo duro que alguien ha hecho para usos lucrativos.
Podemos entrar en legalidades para saber si estos programas están evadiendo leyes de derechos de autor, copyright y demás, pero esto se decidirá con las cerca de 10 demandas, incluyendo una por la empresa de banco de imágenes Getty Images, en contra de las compañías con los productos mencionados anteriormente y los intentos de regulación hacia el uso de inteligencias artificiales en áreas creativas.
Al final del día lo que quiero entender es, ¿por qué quitarle la diversión y el alma a algo tan bonito como el arte? Sean ilustraciones, guiones, animaciones o actuaciones, las personas dan todo de sí mismas para poder traer a la realidad algo que está en su cabeza y el querer replicarlo en masa como si fuera un chasis de carro no me da buena espina para el futuro.
